Todas las recetas
Pastel de cordero o Sheperd´s pie
Ingredientes para 20 personas
- 1.250 kg cuello de cordero
- 5 cebollas
- 10 dientes de ajo
- 3 tomates
- 1 pimiento rojo
- 1 pimiento verde
- 1 l de vino tinto
- 1 l de caldo de ave
- Tomillo
- Romero
- AOVE
- Sal
- Pimienta
- 3 kg de patatas
- 10 chirivías
- 5 yemas de huevo
- 150g de queso fresco
- Comino en polvo
Preparación
- Marcamos el cuello de cordero cortado a trozos en la sartén con un poco de aceite. Retiramos.
- En la misma sartén, rehogamos el ajo cortado a láminas finas y la cebolla picada en brunoise.
- Agregamos los pimientos picaditos y las hierbas aromáticas.
- Rehogamos todo bien y añadimos el vino tinto. Cuando haya evaporado un poco, vertemos el caldo de ave caliente y la carne reservada.
- Dejaremos cocer hasta que la carne esté tierna, durante 2 horas aproximadamente.
- Mientras tanto, prepararemos el puré cociendo las patatas y las chirivías en agua hirviendo con sal.
- Una vez cocidas, dejamos enfriar un poco, pelamos y pasamos por el pasapurés.
- Para acabar el puré, añadimos aceite de oliva, comino, sal, pimienta y el queso de fresco.
- Después de mezclar bien, lo colocamos en una manga pastelera con boquilla rizada y reservamos.
- Cuando la carne de cordero esté cocida y templada, podremos deshuesarla usando guantes de latex.
- Mientras deshuesamos, pondremos a reducir la salsa a fuego vivo.
- Para montar el pastel, colocamos la carne desmigada en una fuente de horno y mojamos con la cantidad de salsa que admita.
- Cubrimos la carne con montoncitos de puré y metemos en el horno precalentado a 200ºC hasta que el pastel esté doradito.
Nota:
- Este tradicional pastel británico de cordero o Shepherd's pie puede hacerse con otro tipo de carne, con pescado e incluso con legumbre. Si cambiamos el ingrediente principal, el nombre cambiará aunque seguirá estando igual de rico.
Curiosidades sobre las chirivias:
- Su nombre científico es pastinaca sativa. Es una hortaliza de raíz similar a la zanahoria, pero de color crema-marfil y con un ligero sabor anisado. Además de ser una excelente fuente de fibra, tiene vitaminas B, C, E, K y minerales como el potasio, magnesio, sodio, fósforo, calcio, selenio y zinc. El otoño y el invierno son las mejores estaciones del año para degustarla si todavía no lo has hecho.
|